Nuestras ventosas faciales son vasos de succión y están hechas de silicona de grado medico.
¿Cómo se usan?
Primero, se aplica aceite sobre la piel, ya que esto reduce la fricción y molestias que pueden ser causadas por la succión.
Después se toma la ventosa en la mano y se realiza una pequeña presión sobre su base. La coloca sobre la piel de la cara y comienza a deslizarla dando un masaje suave y constante sobre la zona a tratar. (*no parar)
*NO parar ya que se puede hacer demasiada presión en una zona y esto puede generar un hematoma)
Beneficios
La succión causada trae sangre a la superficie de la piel y por esto se enrojece. El aumento de la irrigación de la zona mejora la circulación a través de los tejidos, lo que estimula la “sanación de la piel”.
Otros beneficios de usar ventosas en el rostro:
– Activa el sistema circulatorio, a través del aumento de la irrigación sanguínea en las zonas tratadas. Esto produce mejor oxigenación, lo que causará una mejora visible en la apariencia de la piel, mejorando, además, su nutrición.
Los efectos fisiológicos que tiene la aplicación de ventosas son los siguientes:
Aumento de irrigación sanguínea.
Alivio del dolor.
Aumenta circulación linfática (disminuir edemas).
Aumenta el metabolismo celular.
Aumento del oxígeno y nutrientes de los tejidos.
Hiperemia local.
Liberación miofascial.
Contenido:
1.- Una bolsita de lino.
2.- Dos ventosas faciales pequeñas.
3.- Dos ventosas faciales medianas.